El parque nacional de Cahuita tiene un sendero de 8 km. de naturaleza desbordante en los que paseas entre la selva y las playas. Allí me fuí con Beatriz, valiente vallisoletana a la que mando un beso.
El problema nos lo encontrarnos a la hora de darse un bañito; en seguida aparecían montones de monos manguis para llevarse nuestra ropa y pertenencias.
Aunque lo intenté y parece en esta foto, al final no hubo piquito con el mono.
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6 reacties
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Mamen
1 Februari, 2008 om 9:21 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
¡Qué graciosos! y ¡qué bonitos!, Jo qué pasada de sitio.
Cobi
2 Februari, 2008 om 16:49 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
Qué gracioso! Qué pintoresco! Y el mono también!
Mamen
3 Februari, 2008 om 15:41 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
Jajajajajaja, muy gracioso también tú Cobi.
Anoniem
3 Februari, 2008 om 17:37 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
Y ademas muy mono…
Josan.
Cobi
4 Februari, 2008 om 22:34 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
Ja, Mamen, tú también eres muy mona (ahora Josan dice “y además muy graciosa” y entramos en un bucle infinito que provoca un colapso espacio-temporal)
(just kidding, no creo que esto provoque ningún colapso!)
Mamen
5 Februari, 2008 om 10:24 (UTC 1) Koppeling naar deze reactie
Hahahaha. Vale, cerramos el “bucle”, que así no acabamos nunca
. ¿Ves? Ya me he quedado enganchada aquí en el espacio-tiempo por tu culpa. Voy a leer la siguiente entrada que si no…¡no avanzo!